Revue hispanique; recueil consacré à l'étude des langues, des littératures et de l'histoire des pays castillans, catalans, et portugais
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HISPANIQUEREVUEREVUEHISPANIQUElangues, des littératures et de rhis'.oueà l'étude desRecueil consacrécatalans et portugaisdts pays castillans,DIRIGE PARFoulché-DelboscR.TOME XXXVIINEW YORKOF AMERICATHE HISPANIC SOCIETYWest 15e th StreetAuDUBON Park,'e)"(9^bPARIS ]]\de Liij.t--^'"fKLINCKSIECK, 11, RueLIBRAIRIE C. ^^rf!' '1916ùooit.31EDITORIAÎ. BAILI.Y-BAILLIHREIMPRIMERIE DE LA CASA/ iEL PANAMERICANISMOSU PASADO Y SU PORVENIRIDéclina el prestigio de la nocion biolôgica de raza, internafatalidad ineludible como el destine antiguo, que revelan la lineadel crâneo el color de la pie). Los sociôlogos renuncian a des-ycubrir pura en nacionessangre confusas, desconocen la preemi-nencia hereditaria que se atribuyera a determinados grupos ét-nicos, discuten la sumaria oposicion entre indogermanos se-yniitas que explicaba, en la mente de ambiciosos historiadores,el desarrollo del drama de los pueblos, su progreso su deca-ydencia, la construcciôn de imperios filosofîas, la misiôn dey( )riente ( )ccidente. Pero no se abandonay la idea de la razacomo sîntesis de los diversos elementos de una civilizacion defi-nida. Religion, arte, lengua, convivencia secular en determinadoterritorio, tradiciôn, afinidades morales que fijan a través de lossiglos, durables culturas caractères inconfun-=psicologicosydibles;En el siglo xix reclaman las nacionalidades sus derechos vio-lados. Se ha extendido a ellas el beneficio del principio revolu-cionario: los ...
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HISPANIQUEREVUE REVUE
HISPANIQUE
langues, des littératures et de rhis'.oueà l'étude desRecueil consacré
catalans et portugaisdts pays castillans,
DIRIGE PAR
Foulché-DelboscR.
TOME XXXVII
NEW YORK
OF AMERICATHE HISPANIC SOCIETY
West 15e th StreetAuDUBON Park,
'e)"(9^b
PARIS ]]\
de Liij.t--^'"fKLINCKSIECK, 11, RueLIBRAIRIE C. ^^
rf!
' '1916 ùooi
t.31
EDITORIAÎ. BAILI.Y-BAILLIHREIMPRIMERIE DE LA CASA
/ i EL PANAMERICANISMO
SU PASADO Y SU PORVENIR
I
Déclina el prestigio de la nocion biolôgica de raza, interna
fatalidad ineludible como el destine antiguo, que revelan la linea
del crâneo el color de la pie). Los sociôlogos renuncian a des-y
cubrir pura en nacionessangre confusas, desconocen la preemi-
nencia hereditaria que se atribuyera a determinados grupos ét-
nicos, discuten la sumaria oposicion entre indogermanos se-y
niitas que explicaba, en la mente de ambiciosos historiadores,
el desarrollo del drama de los pueblos, su progreso su deca-y
dencia, la construcciôn de imperios filosofîas, la misiôn dey
( )riente ( )ccidente. Pero no se abandonay la idea de la raza
como sîntesis de los diversos elementos de una civilizacion defi-
nida. Religion, arte, lengua, convivencia secular en determinado
territorio, tradiciôn, afinidades morales que fijan a través de los
siglos, durables culturas caractères inconfun-=psicologicosy
dibles;
En el siglo xix reclaman las nacionalidades sus derechos vio-
lados. Se ha extendido a ellas el beneficio del principio revolu-
cionario: los derechos también a la na-del hombre comprenden
cion, persona eminente, estrecha agrupacion que vence al tiempo
a la caducidad de los hombres. Inclinândose ante las creacio-y
'Revtie Hisjianique.— (_). GARCfA CALDERÔNFRANCISCO
cstadistas poetas la autonomialies lie la historia, defienden dey
sociales. Libert?d unidad exigen los pueblosvastas entidadcs y
pangermanismo,Surgen asî el el panserhismo, eldivididos.
panislamismo, el panamericanismo,paniberismo, el el panesla-
panmagiarismo hasta el panasiatismo; riqueza devismo, el y doc-
trinas semejantes que aspiran a determinar el rasgo peculiar de
hombres, acercar a gentescada fuerte grupo de a afines con-y
difusa, sujeta a contradictorias hegemonîas,vertir la nacion en
perfecto que prolongarâ acrecerâ en el future las in-I-lstado y
quiétas tradiciones del pasado.
A veces un pueblo libre atrae a provincias vecinas de la mis-
Asi Serbia, construcciôn politica de una variedad dema raza.
eslavos que va a formar, con los yugoeslavos de Croacia dey
lîosnia, con poblaciones esclavizadas por Austria, una soberana
federaciôn. Otras, sin llegar a la unidad politica, se acercan los
iiiienibros disperses, de una nacio-disjecta membra, familia de
nes. Los iberos que el Atlântico sépara, forman una idéal aso-
ciaciôn; se enorguUecen de su tradiciôn de su lengua olvi-y y
dan, en citas de fraternidad, antiguaelocuente la violencia que
alejara a las colonias de la metrôpoli. Inglaterra Estados Uni-y
dos, el «niundo que habla inglés:> afirma su unidad moral, de-y
mocracias de mares remotos se agregan al concierto de los nias
vastos estados sajones.
A este libre acuerdo otras si'ntesis en que la fuerzase oponen
impera. En el paneslavismo descubrimos no solo la union de
subrazas afines, sino también el mistico idéal de la dominacion.
Ante el eslavo que busca trâgicamente la pura unidad de su es-
tirpe desaparecen las nacionalidades menores. Y el pangerma-
nismo, que dégénéra en locura, no solo reûne en fusion necesa-
ria partes heredad que,separadas de la vieja germana, sino
abandonando la politica, aspira redimirsimple construcciôn a
con hierro sangre. En las mas extranas gentes descubre ras-y
gos alemanes; en todos los continentes, prolongaciones o perver-
siones de una inisnia iniciacion civilizadora.
