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Español
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2012
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Publié par
Date de parution
01 octobre 2012
Nombre de lectures
0
EAN13
9788431553890
Langue
Español
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01 octobre 2012
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0
EAN13
9788431553890
Langue
Español
P ATRIZIA R OGNONI
La limpieza
integral de la casa
A pesar de haber puesto el máximo cuidado en la redacción de esta obra, el autor o el editor no pueden en modo alguno responsabilizarse por las informaciones (fórmulas, recetas, técnicas, etc.) vertidas en el texto. Se aconseja, en el caso de problemas específicos —a menudo únicos— de cada lector en particular, que se consulte con una persona cualificada para obtener las informaciones más completas, más exactas y lo más actualizadas posible. DE VECCHI EDICIONES, S. A.
De Vecchi Ediciones participa en la plataforma digital zonaebooks.com
Desde su página web (www.zonaebooks.com) podrá descargarse todas las obras de nuestro catálogo disponibles en este formato.
Traducción de Nieves Nueno Cobas.
Diseño gráfico de la cubierta: © YES.
Fotografías de la cubierta: © iStockphoto .
Fotografías del interior: © picsfive /Fotolia.com © Imagine/Fotolia.com , © Yanik Chauvin /Fotolia.com , © Gilles Paire/Fotolia.com , © Pavel Timofeev /Fotolia.com , © meailleluc.com/Fotolia.com , © Marek Slusarczyk /Fotolia.com , © Kristina Afanasyeva /Fotolia.com , © Beboy /Fotolia.com , © rraheb /Fotolia.com , © zimous /Fotolia.com , © Garret Bautista/Fotolia.com , © karam miri / iStockphoto , © anders tanger /Fotolia.com , © Marquis Washington/Fotolia.com , © Graça Victoria/Fotolia.com , © Dmitry Rukhlenko /Fotolia.com , © angelo.gi/Fotolia.com , © Leonid Nyshko /Fotolia.com , © Akhilesh Sharma /Fotolia.com , © Christopher Hall/Fotolia.com y © full image /Fotolia.com .
© De Vecchi Ediciones, S. A. 2012
Avda. Diagonal 519-521, 2º - 08029 Barcelona
Depósito Legal: B. 25.411-2012
ISBN: 978-84-315-5389-0
Editorial De Vecchi , S. A. de C. V.
Nogal, 16 Col. Sta. María Ribera
06400 Delegación Cuauhtémoc
México
Reservados todos los derechos. Ni la totalidad ni parte de este libro puede reproducirse o trasmitirse por ningún procedimiento electrónico o mecánico, incluyendo fotocopia, grabación magnética o cualquier almacenamiento de información y sistema de recuperación, sin permiso escrito de DE VECCHI EDICIONES.
Introducción
Mantener la casa limpia es algo básico y fundamental, y en el día a día solemos invertir el tiempo necesario para realizar las tareas imprescindibles para que nuestro hogar esté en perfecto estado.
Sin embargo, esto no quita para que, cada cierto tiempo, nos planteemos la necesidad de una limpieza más a fondo, centrada en esos pequeños detalles que en nuestras tareas cotidianas solemos pasar un poco más por alto.
Muchas veces, cuando planificamos una limpieza de este tipo, nos encontramos con que no sabemos muy bien cuál es la mejor manera de llevarla a cabo para obtener el máximo rendimiento en el menor tiempo posible. Y es entonces cuando nos vemos obligados a acudir a profesionales para suplir nuestra falta de capacidad para llevar a cabo estos trabajos, con el consiguiente desembolso económico.
El objetivo de este libro es enseñarle esos pequeños trucos de los profesionales de la limpieza que le permitirán dejar reluciente hasta el rincón más recóndito de su hogar: sanitarios, cocina, terraza, mobiliario, pavimentos, adornos, joyas, electrodomésticos , alfombras...
Dejarlos impecables está ahora al alcance de su mano, de una manera fácil y sencilla, y sin costes extras.
Material necesario
Para la limpieza en casa se requieren algunos utensilios y productos que puede hallar con facilidad en tiendas o grandes almacenes. El hecho de hacerse con el material necesario simplificará mucho las labores.
Para una mejor organización, guárdelo todo en los envases originales y, siempre que sea posible, en un armario especial para este fin dividido por categorías (trapos, escobas, detergentes, etc.). El armario puede estar en la cocina o en el lavadero, por ejemplo.
Guantes
Acostúmbrese a usarlos para protegerse las manos y, sobre todo, prevenir alergias a los detergentes.
Los hay de diversos tipos: los desechables, muy ligeros, para quitar el polvo o efectuar trabajos que ensucian mucho, como limpiar la plata o dar lustre a los zapatos; los afelpados, recomendables cuando se utilizan con agua hirviendo, y los granulados, mejor si además son también afelpados, que ofrecen un agarre seguro, necesario, por ejemplo, para la tarea diaria de fregar los platos.
Limpiadores
En el mercado los hay de todos los tipos y para todos los usos. Escoja los multiusos si tiene problemas de espacio y los específicos si puede guardarlos sin dificultad. En cualquier caso, siempre será útil tener alcohol, amoniaco, lejía y limpiadores para madera, cristales, suelos y sanitarios.
Electrodomésticos
El aspirador es muy útil y puede usarlo para limpiar el suelo en lugar de la tradicional escoba. Escójalo con un motor potente, de al menos 750 W, con potencia regulable a fin de poder utilizarlo para las alfombras y la moqueta, pero también para las cortinas y los sofás. Sin embargo, si tiene grandes superficies con moqueta, le convendrá un limpiador de alfombras, que, además de aspirar la suciedad, levanta el pelo gracias al cepillo que lleva incorporado. Con el fin de no recalentar el motor hay que sustituir la bolsa del polvo antes de que esté demasiado llena.
Además, necesitará una abrillantadora si tiene el suelo encerado y una limpiadora de moquetas si posee este tipo de revestimiento, aunque también puede alquilarla, una buena solución que permite ahorrar dinero y espacio, además de contar siempre con un aparato eficiente. Limpie los cepillos de la abrillantadora sumergiéndolos durante una hora en agua y amoniaco. Lave el depósito de la limpiadora de moquetas y mantenga siempre limpios los orificios por los que sale el agua.
Escobas
Use una escoba de cerdas sintéticas y suaves para los suelos de madera y, a ser posible, que pueda ponerse en ángulo para alcanzar los puntos más difíciles. Para los demás suelos, puede usar escobas con cerdas mixtas, mientras que para los exteriores convendrá elegir escobas de paja o con cerdas metálicas.
Límpielas pasando un peine de púas anchas entre las cerdas. Seguidamente, lávelas con agua caliente y jabón, y a continuación, aclárelas bien y séquelas con las cerdas hacia arriba. Al guardarlas, cuélguelas siempre de un gancho, pues las cerdas apoyadas en el suelo con el tiempo se doblan y restan eficacia a las escobas.
Cepillos y pinceles
Para quitar el polvo de muebles tallados, marcos, libros, etc., hace falta pinceles suaves de diversos tamaños. También serán útiles un cepillo de dureza media y mango largo para cepillar butacas y sofás, uno de mango largo para los radiadores y otro en forma de pico para las persianas venecianas. Límpielos como hemos indicado para las escobas.
Trapos
Para quitar el polvo, utilice trapos de franela suave o de gamuza sintética, que podrá rociar con los productos antiestáticos adecuados. También existe la posibilidad de comprar paños desechables para el polvo. Son un poco más caros pero, sobre todo si padece alergias, mucho más eficaces.
Para los suelos, utilice mopas de lana para abrillantar y de nido de abeja para lavarlos. Lave siempre los paños después de su uso y déjelos secar bien antes de guardarlos; si los mete en la lavadora, compruebe que no se deshilachan, pues obstruirían el filtro.
En las tiendas se encuentran también fregonas de tejido sintético, muy prácticas, porque se utilizan con el cubo adecuado que permite escurrirlas bien.
Para trabajos muy sucios, por ejemplo para la limpieza de la plata, utilice trapos viejos que pueda tirar después de su uso: puede usar retales de ropa que ya no emplea o de sábanas gastadas. Sin embargo, no olvide eliminar botones, ganchos y todo lo que pueda rayar o marcar las superficies que vaya a limpiar.
La casa, paso a paso
Entrada y escaleras
Es importante mantenerlas bien limpias, porque son la primera zona por la que entra la suciedad en una casa. Coloque delante de la puerta, en el exterior, un felpudo bastante amplio y límpielo a menudo sacudiéndolo. Si tiene jardín o si para entrar en casa debe superar una zona fangosa, coloque en el exterior también un quitafango adecuado, es decir, un hierro curvo o un cepillo duro contra el que puedan frotarse las suelas de los zapatos, para eliminar la mayor parte del barro antes de entrar.
Empiece a limpiar por la parte superior de las escaleras o por el lado opuesto a la puerta pasando el aspirador. A continuación, elimine el polvo de la barandilla de las escaleras y límpiela con los productos adecuados. Friegue las escaleras y, a continuación, el suelo de la entrada, siguiendo las instrucciones dadas para los diversos tipos de revestimiento; si es necesario y lo cree conveniente, extienda una fina capa de cera.
Salón
El salón es, sin duda, la habitación «más vivida», por lo que requerirá un cuidado diario, al menos en lo que respecta al orden y a las pequeñas limpiezas. Una vez por semana, o cuando lo considere más oportuno, procederá en mayor profundidad moviendo los pequeños muebles, las sillas y las butacas a fin de poder limpiar también el suelo y los rincones más incómodos de alcanzar.
Dormitorios
Por la mañana, eche hacia atrás mantas y sábanas, abra la ventana y renueve el aire de la habitación. En invierno, bastan diez minutos, entre otras cosas porque la diferencia de temperatura entre el interior y el exterior facilita la renovación del aire. Evite poner las sábanas y las mantas sobre el alféizar de la ventana, pues además de ensuciarse podrían ofrecer hospitalidad a algún insecto, con consecuencias más bien desagradables.
Las habitaciones de los niños presentan algunas exigencias adicionales: deje el suelo lo más libre posible, de forma que tengan espacio para jugar tranquilamente, sobre todo si son pequeños. Además, así podrá limpiarlo con mucha más facilidad. Al menos una vez por semana, lave los juguetes de madera y de plástico de los